Azkena Rock Festival 2022: Vuelve a vibrar Vitoria-Gasteiz durante tres días

Al Azkena se va. Eso es algo que todos los azkeneros de pro tienen claro conforme se va acercando el mes de junio, independientemente de la situación de la cuenta bancaria de cada uno, lo potente del cartel, las previsiones meteorológicas y demás menudencias.

Y es que el festival que cumple ahora 20 años, y que fue bautizado así por lo tardío de su celebración (azkena en euskera significa último) con respecto al resto de festivales que se dan en nuestro país, vuelve con más fuerza que nunca después del parón provocado por la pandemia.

De ahí que los asiduos a esta gran cita para los amantes del rock, en su sentido más amplio, se estén frotando las manos mientras desempolvan camisetas negras y viejos vinilos que fueron publicados en los 60, 70, 80 y 90, pero hoy siguen sonando igual de atronadores. Aunque, ojo, conviene no pasar por alto que en el ARF 2022 también se tendrán muy en cuenta a aquellas bandas que están despuntando en el panorama actual.

Y precisamente en la primera jornada del festival nos encontramos referencias de lo más interesantes a pesar de su corta trayectoria. Es el caso de Morgan Wade, una de las grandes responsables de que hoy se hable del nuevo country, o la banda madrileña Morgan, que ya registró en 2019 una de esas actuaciones que pasarán a los anales del festival gasteiztarra. La voz de la experiencia la ponen The Offspring, Toy Dolls y Fu Manchu, que nos deleitarán con un cancionero trepidante a la par que contundente de ese que no falta en una playlist que contenga lo más granado del punk festivo a la par que melódico, en el caso de los dos primeros, y del stoner-rock en el caso de los terceros.

El viernes azkenero parece estar hecho a medida de los amantes de los sonidos noventeros, y es que ese día van a poder sacarse la espinita aquellos que en su momento no pudieron ver a grandes bastiones del rock alternativo, el psychobilly, el punk-rock, el grunge o el metal alternativo. Los culpables son The Afghan Whigs, una de esas bandas únicas en la historia del rock que destacan por su personalidad arrolladora; los alemanes Mad Sin, que van a poner aquello patas arriba con sus ritmos frenéticos; los infalibles Social Distortion de Mike Ness, que seguramente protagonicen una de las jornadas más emotivas; esa gran leyenda llamada Jerry Cantrell que, con cuatro discos en solitario a sus espaldas, sigue demostrando que tiene mucho que decir después de su periplo en Alice In Chains; y los míticos Life Of Agony, con Mina Caputo al frente.

Muy plausible también la representación nacional, a cargo de los Ilegales de Jorge Martínez, que acaban de estrenar nuevo disco (‘La lucha por la vida’), los vascos Delirium Tremens, que vuelven después de 30 años desaparecidos, y los icónicos Soziedad Alkohólika, que juegan en casa y que, sorprendentemente, nunca se habían dejado caer por el ARF.

La tercera y última jornada del festival tiene nombre de mujer, o más bien de mujeres. Y es que, a pesar de que para entonces ya habrán pasado por la alfombra roja del Azkena Rock Festival artistas de la talla de Morgan Wade, Adia Victoria o Nina de Juan (Morgan), la cosa se pondrá realmente seria el 18 de junio. Porque para motomamis las que van a ir desfilando por la campa de Mendizabala a lo largo de la tarde del sábado.

Ese día le tocará a la veterana Emmylou Harris conquistar a los parroquianos a ritmo de country como ya lo hiciera su buena amiga Lucinda Williams en 2016. Eso sí, esperemos que en esta ocasión el tiempo acompañe y podamos disfrutarla al máximo en una jornada en la que también sonarán los grandes clásicos en clave contestataria de Patti Smith, la enorme Suzi Quatro, autora de un himnos de la talla de “Stumblin’ in” o “If you can’t give me love”, o el bajo juguetón de Zombierella (Messer Chups), que será uno de los platos fuertes del escenario Trashville.

Mujeres tan dispares, tan pioneras y tan necesarias todas como cada uno de los sonidos que se irán solapando a lo largo de esos tres días en los que varias generaciones de rockeros volverán a reencontrarse después de tres años de silencio que se han hecho eternos.

Ya queda menos, amigos.