Alizzz se come La Riviera

Alizzz se come La Riviera

Con entradas agotadas desde hace mucho tiempo, Alizzz se presentaba en Madrid para dar un concierto memorable.

Eran las 21:30 del pasado jueves cuando Cristian y los suyos irrumpieron en escena para poner fin al murmullo de un público algo más que expectante, gente que ya había llenado la sala desde media hora antes del arranque del show. No era de extrañar que, con los dos primeras canciones, “Siempre igual” y “Superficial”, el público ya estuviera dentro del bolsillo del catalán.

No hubo spoiler, se sabía que venía a fusilar su primer y afamado disco de 2021 (‘Tiene que haber algo más’), junto al EP publicado recientemente (‘Boicot’), concretamente en febrero de este año . Con su particular estilo, su energía arrolladora y ese buen rollo que desprende su pop bailable, era de prever que las canciones se convirtiesen en himnos para ser coreados, uno tras otro, por el respetable. Aquello parecía un karaoke de 2000 personas.

La banda (bajo, guitarra, batería y teclados), todos grandísimos músicos, van en volandas. No estuvo ni Bandini, ni Amaia, ni Jota, ni C. Tangana, ni ninguno de los colaboradores de su ópera prima. Aquí los featuring venían del público, que arropó con especial intensidad al grupo en canciones como “Todo me sabe a poco”, “Amanecer” y “El encuentro”.

A través de videoproyecciones sencillas y una presencia tirando a discreta sobre el escenario, Crisitian fue el héroe de la noche, haciendo gala de su “menos es más”, y animando a todos a disfrutar de su gran fiesta.

Antes de cantar “Que pasa nen”, comentó que le había sorprendido mucho que el público madrileño agotase las entradas antes que en Barcelona, de ahí que dedicase al respetable la canción “Los mejores”. Y ya se sabe que en sus conciertos nunca falla “Antes de morirme”, el tema que produjo para C. Tangana y Rosalía, y que se convirtió en un momento muy especial de la velada.

“Porque todo está bien” y su “Ya no siento nada”, por su parte, cerraron un concierto que quedará para el recuerdo y que nos deja la sensación de que esto no ha hecho más que empezar.

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